ADVERTENCIA: Algunos contenidos de este blog pueden herir la sensibilidad de la gente sin humor o con problemas de tránsito en el tramo final de su orto. La ironía es clave aquí. En caso de intolerancia, consulte a su proctólogo.

viernes, 3 de junio de 2011

El séptimo (¿de caballería...?)


Cuarta y penúltima prueba del Open de Madrid. Lugar: un desierto conocido como Ciempozuelos. Secarral donde los haya, tostadero infernal, paisaje lunar, estepa estilo almeriense, vamos que parece que vas a ver pasar una diligencia con tres indios a caballo detrás pegando alaridos. Lo más alto allí es el vértice de tu casco. Bueno, miento, son las torres de alta tensión que coronan los cerrillos que rompen la monotonía horizontal del redundante horizonte. La previsión meteorológica promete tormentas y aguaceros a lo largo de la mañana. Como agua de Mayo, y nunca mejor dicho pues es día 29 del quinto mes de 2011, espero que la predicción se cumpla totalmente porque si no es posible que perezca y me evapore como una gota de sudor en el Gobi. Tres días llevo con un constipado de los raros, de esos que podríamos llamar del tipo gallego pues no sabes si viene o va. La garganta inflamada, voz de fiestero sin haber catado fiesta alguna, dolor de cabeza y escalofríos en plena canícula. Y lo que te queda, moreno...

Madrugo el domingo más que para ir a trabajar, gilipollas que es uno, y a eso de las 6 de la mañana ya estoy empujando unas gloriosas galletas hacia mi irritada garganta. Vamos cinco en la furgoneta, el Guardia, Alonso, Pablo, Miguelón y mis restos. Recogemos a Dave el Primo en Pinto para que le dé un poco el aire (más bien el sol le va a dar...) tras darnos una vuelta por dicho pueblo cortesía de la empanada que tiene, pues se inventa que existe la salida 21 de la A-4. Pues no la busquéis que no existe. Cachondeo a su costa y comentarios acerca de lo que provocan los excesos con el botellón. Corrí en este circuíto en el 2008 y sólo han cambiado una zona. Ahora se sube por la llamada subida de los pinos. ¿Un pinar aquí?¡Pues que buena noticia!. Los deseos de una subida como le gustaría a María del Monte se esfuman al contemplar estupefactos que a pesar de que efectivamente existe el pinar, digamos que se encuentra en estado fetal. He visto arbustos más altos que aquellos enclenques arbolillos recién plantados. De hecho el vegetal más alto del lugar era el cardo común o cardo picoleto, pues eran altos, verdes y con muy mala leche. En serio, no he visto cardos más tochos.

La vuelta de reconocimiento se ha convertido en vuelta de calentamiento, las 9:30 de la mañana y hace un calor y una humedad horrorosos. La garganta se me reseca más aún y lo pulmones no pueden hincharse a gusto. Salen los Master 40 y 50. Yo con manga larga y fresquete en el cuerpo, tengo el termostato bien jodido. Los nuestros marchan muy bien. Pablo queda el 11º, Jose el 13º en Master 40 y Alonso 2º en Master 50. Aparecen Rober y Carliños. También Belén, su amiga Miriam y mi hermana. Todos obedecen mis órdenes estrictas de no mirarlas ni entrarlas. Los chicos nos vamos a calentar un poco (como si no estuviera la cosa caliente ya). Enseguida forman las parrillas. Primero Elite, luego Senior y después los treinta y tantos Master 30. Nervios, muchos nervios. Salida y no puedo meter el pedal por zoquete. Aún así no pierdo muchos metros pero enseguida me adelantan por todos los sitios. Voy el quince o por ahí. La primera bajada la hago como si tuviera los miembros de Pinocho, muy rígido y esquivando los bidones que pierde la gente. En la subida de asfalto me adelantan unos pocos más y veo a Carliños a más de cien metros por delante de mí. No puedo correr más, no tengo fuelle.

Me relajo un poco y charlo conmigo mismo un ratillo:"La carrera es muy larga y dura por el calor, ya irán cayendo poco a poco, recupera lo que puedas". Menos de 22 minutos que tardo en el primer giro. Los gritos de las chicas y los compis me animan muchísimo. Me pongo las pilas y empiezo a coger a gente. Bajo más confiado y me subo la cuesta del pinar montado por primera vez. Adelanto a Carliños y a un montón de Senior. Incluso los Elite van sucumbiendo. Me encuentro muy bien y me marco una segunda y tercera vueltas muy rápidas. La espalda me va dando avisos y en la última vuelta decido subirme el cuestón chungo corriendo para relajar la zona. Hace un calor de mil demonios. Me ofrecen agua para la nuca, pero yo soy muy bruto y del norte, no necesito mariconadas. Dave hace de aguador oficial y tiene poco éxito conmigo porque no tengo tiempo ni de beber. Adelanto al tercer Senior y cojo al séptimo Elite. Voy séptimo de Master 30. No voy a alcanzar a nadie más, así que me dedico a controlar a los de atrás para que no me enganchen. La espalda me duele un huevo pero llego con una sonrisa en la boca. Mi objetivo este año era entrar en alguna carrera entre los quince primeros, entre los diez sería la leche, y al final: ¡Objetivo cumplido!. Carliños llega el 9º y Rober el 11º. A Miguelón le doblan por los pelos y aún así se marca un 22º. Al final acabamos 24. En Elite Borja se tiene que retirar porque le ha picado una avispa y le provoca una inflamación muy fuerte. Menuda putada.

Las chicas y los Enbici me felicitan y yo en el Limbo, pero no de gusto, que también, sino de dolor lumbar. Me doy una vuelta para soltar un poco la musculatura, una ducha y a desmontar el campamento. Voy a tener que dormir con la ventana abierta para cogerme más resfriados como éste, porque no veais cómo zumbo...

P.D.: Gracias, gracias y mil gracias a las niñas que se fueron al fin del mundo para gritarme: "Pero dale a los pedales, coño..." Como si la jodía bici andase sola, no te giba...

P.D.2: Enhorabuena a todos los sufridos ciclistas que acabaron como pudieron esta matanza, en especial a los míos, que lo dieron todo y además puntuaron. Éxito total.

P.D.3: Que sepáis que estamos a viernes y todavía no me quito de encima la mierda esta de constipado, enfriamiento, alergia, faringitis o lo que cojones sea...

1 comentario:

Dave The Rake Goldman (bad to the bone) dijo...

Pero qué exagerados sois los del norte, ¡si tan árido no es la zona! aunque tiene su puntito real lo de que en cualquier momento te aparece el sétimo de caballería. Es más, teniendo el cuartel de la Guardia Civil en Valdemoro, con el cuerpo de caballería, el que suscribe se los ha encontrado más de una vez.
Por cierto, ya sé por qué os dije que es la salida 21... porque es el km 21; es la salida 20 porque el carril de salida empieza en el kms 20 y termina en el Mcdonalds (antigua casa de putas del pueblo, por cierto) que ya es km 21.
Una vez más, felicidades por ese magnífico séptimo puesto. Todos los que tuvísteis huevos de meteros con ese calor a correr durante cerca de dos horas tuvisteis un mérito acojonante.