Amaneciendo

El naranja amanecer se deshilacha en sus últimos estertores.
Silenciosamente cruza el Rey a través de la persiana.
Dibuja en tu cuerpo redondas monedas de brillante oro.
Ignorantes mis yemas que pasean por tus dunas ajenas a su fortuna.
Con la enorme ventura que a tu lado es yacer.
Recién nacidos los ojos que te contemplan.
Dichosos pues no todos a una Reina pueden admirar.

Abierto por vacaciones

Pues nada más y nada menos que siete años han pasado, dos hijos, dos mudanzas, un coche menos, una furgoneta más, un trabajo distinto, menos pelo, más arrugas, dos bicis robadas, dos bicis compradas, misma pareja (gracias a Dios y no sé cómo hace para aguantarme), varias caídas, restregones, arañazos, golpes y contusiones, una fractura, dos cascos rotos, dos esguinces de tobillo, dolores varios fruto de sobrevivir a varios equinoccios, misma ironía, peor cabeza, varias medicaciones, varios diagnósticos...En fin...Que la cabeza cuando quiere es muy mala. Por eso retomo este Blog fosilizado e inerte que tantas alegrías me dió para "auto-terapizarme" y quitarme de encima la tontería que me envuelve desde hace unos años. Me voy quitando telarañas para volver a ser el que era, que lo echo mucho de menos. Me pongo una sola norma: Aunque de vez en cuando se caiga por aquí algún poema o relato algo moñas me prohíbo la tristeza en este espacio. Espero haceros reír y entreteneros. Bueno, al lío...